martes, 4 de octubre de 2005

qué hacer con tan poquita fé?

Damela, yo la recargo en la refineria de mi alcoba
esa en que cada noche yo me voy al mundo de morfeo
pensando en ti y reanimando mi esperanza
de volver a tomar tus manos.
Dejala libre, yo la alcanzo en una mañana aciaga
donde el unico motivo para despertar
es la esperanza de volver a ver tus ojos.
Echala a rodar, yo la persigo mientras pasa el tiempo
y llega la fecha en que renazca en ti
la esperanza de verme a mi.

2 comentarios:

eyrenne dijo...

¿Y de que se alimenta la fe?

S.S. dijo...

en la confianza

;)