sábado, 28 de mayo de 2005

II

A veces creo haber olvidado la vida en una noche de insomnio, pero ya no recuerdo en cual. Porque todas, han carecido de valor probatorio en los juicios que la existencia me entabla. Ya ni siquiera tengo versos, mis ideas salen en forma de enunciados, en algun intento postumo les corto la sangre con enter, o los endulzo en cafe negro para ver si asi espanto al sueño.

Siempre fui un fantasma revitalizado con la luna, en algun momento la carne invadio mis sombras y adopte rutinas como disfraces. Quiza algun dia el viento me permita despojarme de esta humanidad para volver a ser eso que tanto deteste y que tanto extraño.

Como un pronostico de miedo sin derecho a fallas... te comparto el tequila de mi sangre.

1 comentario:

Avellaneda dijo...

El final siempre lo compartimos...tequila, y sin estar juntos.