miércoles, 17 de febrero de 2010

One night stand

Son las 3 de la mañana, esta noche ni las brujas salen. La habitación sumida en una placentera oscuridad y yo no puedo dormir. Es típico. Típico hotel que huele a madera vieja, la regadera solo escupe gotas frías y las sabanas me pican en la espalda. Pero esta limpio y es barato. Enciendo un cigarrillo y el flash del encendedor ilumina el buro con una lata de café helado y un pastelillo sin terminar. Me parece ver que algo me sonrió entre las sombras. Luego yo sonrió, cuando doy una calada al cigarrillo y se ilumina de rojo el ventilador y parte de la pared me imagino que pasaría si en la siguiente fumada un rostro demacrado y fantasmal se me apareciera ahí. Pero no sucede. Los fantasmas, ahora se, no existen, sólo aparecen cuando uno los invoca con la fuerza del miedo, o de la desesperación, como los recuerdos. La realidad es siempre plana, inalterable como un servidor público que sólo sirve para fastidiar. Como el tiempo, como la mierda, como la vida. Todo es inalterable y a grandes razgos no cambia nada en el pasar de decenas de años. No hay fantasmas. Ella se remueve a mi lado, tose dos veces y yo contengo la respiración para que no despierte. Fracaso.

-¿No puedes dormir?
-De que puedo puedo, pero me estoy tomando un descanso.
-Gracioso. Si fumas menos podrás dormir.
-Tal vez no quiera hacerlo.
-Sabes, creo que las vecinas empiezan a sospechar.
-Las vecinas jamás sospechan, siempre están seguras.
-Y creo que mi hijo también se ha dado cuenta. Y, no se, mi marido…
-Oye, creo que la empieza a sospechar algo eres tu.
-Tal vez. ¿Te iras temprano?
-Temprano, lo prometo.
-No lo decía por eso.
-Pero yo si.
-El próximo mes, yo te llamo.

Da media vuelta y vuelve a dormir tan rápido que no alcanzo a terminar el cigarro. Yo doy otra calada, pero nada, el ventilador sigue siendo ventilador. Apachurro el cenicero en su mar de cenizas y me cubro con el cobertor. Empieza a hacer frio, ella tose tres veces. Cierro los ojos, pienso en... cosas que no existen.

4 comentarios:

Oceanida dijo...

No tientes al diablo que va y lo que no existe se te aparece. jaja.

besos.

Morbo dijo...

anda, lo mismito decia mi mama... pero en mi casa se oyen ruidos raros

O_O

un besote =)

TruHan dijo...

si logro llegar a puerto conmigo y siendo yo mismo, valdra la pena el esfuerzo. Todo por dejar de conversar con mis fantasmas.

un abrazoteeeeeeeeee y gracias por tus letras.

PD: perdona el borron, los dedos estan un poco torpes

Morbo dijo...

tambien de vez en cuando, esta bien, asustar un poco

abrazos, y no se apure por los borrones mi amigo... cuidese y siga volando