lunes, 1 de febrero de 2010

Estúpidamente interestelar

Cuando mis labios tocaron tus labios
había cuatro asteroides alineados
formando una cruz
tres planetas exiliados
estrellándose
cómo tu y yo,
había un agujero oscuro
había cometas soltando migajas de pan
sobre la vía láctea de Dios.

Cuando tus labios me tocaron,
supe que el cinturón de Orión
había perdido el valor.

Extrañarte así.
Esta fuera de la mecánica universal.

Quererte así,
es... la inyección letal
en nuestras venas espaciales.

Somos los argonautas favoritos del olvido.

2 comentarios:

Oceanida dijo...

Se saben cosas de antemano siempre. Bonito universo.

Un abrazotote y mil besos.

Morbo dijo...

alguna vez... alguna vez lo fue...


un abrazo enorme pa' vos, besosssss =)