Calla, canalla, calla

Ven y ponte en mis zapatos por unica vez. Ven y dime si no harias lo mismo... y si no, como lo harias tu? Mira todo desde dentro, observa los detalles, espantate con los resultados, revuelve dentro buscando si habria otra manera. Siempre hay otra manera... pero es que yo no las veo.

Escucho la voz de mi madre cuando decia "callate, niño, callate". Mi boca se abria y no paraba, hasta que escupie fuera las tonterias de mi cabeza, o derruia el ambiente con esos comentarios (siempre mal intencionados) que hacian a las personas girar la cabeza. "Callate niño callate". Pero es que cuando voy a dormir, todas duermen a mi lado, y si en los sueños encuentro a otra, despierto al regazo de ninguna. Y camino por un pantando desolado y voy de la mano de mil recuerdos que acribillan mis miedos y hago puentes con los nombres y me enamoro otra vez en cada esquina. Algunas madrugadas despierto solo y muerto de frio como el tabaco, me asusto le rezo al dios de los canallas por un milagro de falda corta y lengua larga.

Quiza mañana, cuando abra los ojos, o pasado mañana cuando los cierre. No haya nombres, ni suspiros, quiza todas se harten y se larguen a vivir la vida y no tener esta soledad al cuadrado que yo provoco. Y ahi estara mi cinismo sentado en la ventana diciendo: "te lo dije, canalla, te lo dije" y quiza tenga la voz de mi madre. Y nos reiremos juntos y juntos iremos por una cerveza... mi cinismo brindara por la soledad y yo brindare por las memorias.

Pero ven y ponte en mis zapatos, mira dentro, abreme un tajo, quitame los ojos, exprime mis neuronas, busca las arterias y envenename... usa mis gafas para mirar lo que yo miro... y dime adios si asi lo quieres... o vuelveme a querer.


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